¿ Son válidos los implantes para los diabéticos ?

A pesar de que desde hace décadas se piensa que los implantes son perjudiciales para los pacientes diabéticos, los últimos estudios aportados por diferentes fuentes de investigación, entre ellas ITI( International Team for Implantology), nos desvelan como puede ser algo beneficioso para mantener los niveles de glucemia.

La diabetes mellitus tipo II, también conocida como la diabetes del adulto, es un trastorno metabólico crónico que se caracteriza por tener altos niveles de glucosa en sangre.

Tanto la diabetes  como la enfermedad periodontal  ( alteración de las encías y tejidos de soporte del diente), afectan con más frecuencia a personas de edad avanzada; esto unido a la pérdida dental que pueden acarrear si no se tratan, tiene como consecuencia, una alteración de la función masticatoria.

Toda esta alteraciòn de la función  masticatoria puede ser esencial en el tipo de dieta que lleve el paciente, pudiendo repercutir negativamente sobre la diabetes por un mal control de la glucemia ( azúcar en sangre).

Aunque es cierto que los pacientes diabéticos puede tener  un retraso en la cicatrización de los tejidos y un aumento del riesgo de infección, si se administra una pauta antibiótica post-quirúrgica y un tratamiento local con enjuagues de clorhexidina, los estudios nos indican que no hay diferencias entre paciente sano y diabético ( sea con niveles de glucemia controlados o no).

Por lo tanto, podemos concluir, que los implantes pueden mejorar la calidad de vida de los  pacientes diabéticos  y ayudarles a llevar una dieta más acorde a su enfermedad.

Cómo elegir un cepillo de dientes

Ya sea en supermercados, farmacias o parafarmacias, puedes encontrar una gran variedad de cepillos de dientes, tanto manuales como eléctricos, por ello es muy importante saber elegir cual nos ayudara más a mantener una boca sana y libre de placa.

Para elegir bien, primero debemos saber de qué partes se compone un cepillo dental y qué variedades existen en su conformación. Toma nota:

- El cabezal : una de las partes más importantes ya que esta destinada a desorganizar la placa bacteriana y eliminarla de nuestros dientes.
La forma del cabezal, conviene que sea redondeada para facilitarnos la técnica de cepillado.

- Los filamentos: se distribuyen en la superficie del cabezal y son los encargados de realizar la limpieza mecánica, arrastrando la placa que ha desorganizado el cabezal. Algunas casas comerciales, como VITIS ofrecen cepillos con  filamentos ondulados que siguen el contorno de las encias y facilitan el acceso a los espacios interproximales, por lo que hace innecesario el uso adicional de un cepillo exclusivo para zonas interproximales.

- El cuello: es la zona fina y alargada que une el cabezal y el mango. Es deseable que nuestro cepillo permita la flexión en esta zona, hasta adquirir la forma que queramos.

- El mango: elegiremos un mango anatómico y flexible.

Una vez conocidas las partes, nos centraremos en el tipo de filamentos para elegir nuestro cepillo. En la caja podrás comprobar  si se trata de un cepillo duro, medio o blando:

• Los cepillos duros están indicados para personas que tienen una gran salud buco-dental y no padecen sensibilidad ni problemas de encías. Si usamos este tipo de cepillos hay que tener especial cuidado en no ejercer mucha fuerza en el cepillado, ya que este tipo de cerdas son muy rígidas y podrían provocar abrasiones mecánicas si cepillamos con mucha presión.
• Los cepillos medios están indicados para personas con buen estado buco dental pero su boca no es tan fuerte como para aguantar un cepillo con las cerdas tan duras. Este tipo de cepillo es el más utilizado.
• Los cepillos suaves se indican en personas con dientes o encías sensibles o de forma esporádica cuando existe alguna dolencia.

En cualquier caso, tu dentista es quien te podrá indicar con más seguridad que cepillo necesitan tus dientes y encías.

7 claves para prevenir la caries

La caries es el mayor enemigo para nuestros dientes, ya  que desde que nacemos, estamos expuestos a ella.

Las bacterias causantes de la caries ( que son en su mayoría los streptococos mutans) actúan aprovechando una disminución del ph de la saliva, que se produce después de las comidas, para atacar al esmalte, desmineralizándolo y provocando como consecuencia la caries.

Es cierto que hay personas más propensas a  padecerla, a pesar de llevar una correcta higiene buco-dental, normalmente porque el ph natural de su saliva es más bajo, lo que beneficia a las bacterias que lo causan.

Desde la Clínica Dental Loscos de Zaragoza, os damos las claves para declararle la guerra a la caries:

1.    Cepíllate los dientes 3 veces al día con una pasta dental que contenga flúor. Podrás saber cuántas partes por millón de flúor contiene si te fijas en la parte trasera del tubo. Normalmente encontraras de 1450 ppm (partes por millón). En caso de que seas muy propenso a padecer caries estaría indicado una de mayor proporción disponible en nuestra clínica o en farmacias, es decir si sueles tener caries, consigue una pasta dental con más de 1450 ppm.

2.       Si durante el día no puedes cepillarte los dientes, recuerda que lo más importante es lavarte los dientes por la noche, ya que mientras dormimos producimos menos saliva y las bacterias son más peligrosas.

3.       Usa el hilo dental por lo menos 3 veces a la semana. Es una práctica muy poco extendida en nuestra sociedad pero de vital importancia para la salud de las encías.

4.       Renueva tu cepillo cada 3 meses, normalmente observaras que las cerdas del cepillo se van desgastando.

5.       Pregunta a tu dentista que cepillo es el que necesitas, blando, duro o intermedio.

6.       Es importante hacerse higienes dentales cada 6 meses para eliminar la placa y el sarro que con el cepillado diario no podemos eliminar.

7.       Acude al dentista cada 6 meses para controlar que todo está bien.

Fracturas de dientes

La fractura de los incisivos centrales superiores es bastante frecuente, sobre todo en los niños de 6 a 8 años, aunque puede suceder también en el adulto ya sea por un accidente de tráfico o cualquier otro tipo de traumatismo.

El trauma sobre el diente puede provocar varias consecuencias, principalmente la rotura y la avulsión. 
En los dos casos es importante localizar el trozo que se ha fracturado o la pieza completa para reimplantarla si se tratase de una avulsión.
El medio de conservación más óptimo es la leche fresca desnatada y en su defecto el suero fisiológico que mantiene la vitalidad de 2 a 3 horas. Como ultimo recurso se puede mantener en  agua, aunque  puede provocar reabsorbión radicular si esta sumergido mas de 20 minutos.

Como muestra de fractura, os presentamos un caso de dos  incisivos centrales  superiores que han sufrido un traumatismo  y el tratamiento que se lleva a cabo.

El paciente acude a la consulta con dos fracturas, ambas con compromiso de dentina y en principio no complicadas.
Se realiza una exploración de tejidos blandos, ya que la fuerza que reciben los dientes se trasmite a su vez a los tejidos circundantes. Se realiza una radiografía del labio para comprobar que no hay ningún resto de diente clavado en su interior.

Una vez hechas todas las comprobaciones se toman impresiones y se  procede ha hacer el encerado:

A continuación realizamos una llave de silicona del encerado, para reconstruir los incisivos con composite:

Por último el Dr. Ivan Muñoz procede ha la reconstrucción de los incisivos a partir de la llave de silicona y utilizando como material composite estético. Este es el resultado:

Todo el tratamiento se realizo el mismo día y en menos de 1 hora.